El nombramiento afianza la apuesta de Bergoglio por dar puestos de responsabilidad a mujeres, después de nombrar a una portavoz el pasado mes de julio
Por primera vez en sus más de 500 años de historia, una mujer será la directora de los Museos Vaticanos. Barbara Jatta, romana de 54 años y actual vicedirectora, pasará a ser la máxima responsable el 1 de enero y sustituirá a Antonio Paolucci, nombrado director de los Museos en 2007 por el papa Benedicto XVI. El nombramiento afianza la apuesta de Bergoglio por dar puestos de responsabilidad a mujeres, Jatta será la responsable máxima de uno de los museos más visitados del mundo —con más de 6 millones de visitantes en 2016—, y con una de las colecciones de arte más completas, con todo tipo de obras, desde piezas de la Antigüedad Clásica, tapices de los siglos XVI y XVII y series iconográficas de los papas hasta arte etrusco y egipcio. A lo largo de un recorrido de más de siete kilómetros, en la colección de arte vaticana destacan las obras de Rafael, Giotto, Leonardo y Caravaggio y, especialmente, la Capilla Sixtina de Miguel Ángel.
Jatta es una experta en conservación y cuenta con una brillante carrera tanto en Italia como en el extranjero, con los grabados como su mayor especialidad. Se licenció en Letras por la universidad romana La Sapienza en 1986 y completó sus estudios en archivística e historia del arte. Ha sido profesora de Historia de las Artes Gráficas en la Universidad de Nápoles y ha dirigido gran cantidad de artículos, investigaciones y catálogos de arte sobre historia de las artes gráficas y técnicas de grabado. También ha colaborado en proyectos de restauración internacionales y participado en la organización de distintas muestras de arte.
Su carrera está ligada al Vaticano desde hace más de 20 años. En 1996 comenzó a trabajar en la Biblioteca Apostólica Vaticana, desde donde dio el paso a ser vicedirectora de los Museos el mes de junio pasado. Seis meses bastaron al Papa para ascenderla a la dirección.
La nominación de Jatta sucede a la de la periodista española Paloma García Ovejero, que el 13 de julio se convirtió en la primera mujer portavoz de un Papa. Ambas decisiones caminan en la dirección que ya anticipó Bergoglio en 2013 desde Río de Janeiro, cuando anunció que deseaba un Vaticano menos italianizado, con más laicos y más mujeres. “No nos podemos limitar a las mujeres monaguillo, a la presidenta de Cáritas, a la catequista. Tiene que haber algo más. Hay que hacer una profunda teología de la mujer”, dijo entonces.
Dentro de esta idea se engloba también la creación, en agosto, de una comisión para estudiar la posibilidad que las mujeres puedan acceder al diaconato, el grado inferior de la jerarquía eclesiástica, por debajo del sacerdocio, pero con la posibilidad de administrar el bautismo o celebrar matrimonios . Todavía no se han conocido las conclusiones de la comisión, que continúa estudiando el papel que desarrollaron las diaconisas en los primeros tiempos de la Iglesia y la posibilidad de que asuman responsabilidades en la actualidad, pero el nombramiento de Jatta supone un nuevo gesto de apertura hacia las mujeres por parte de Bergoglio.
María Salas Oraá. El Pais, Roma, 21 Dic. 2016